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La maldad no es un rasgo de los niños, ya que no son responsables de sus actos ni ante el juicio del adulto ni ante la ley penal, por esta razón si oímos que una niña de cuatro años dice: "Madre querida, cuando te mueras voy a poder hacer tal o cual cosa" 2, no pensamos: "¡Qué maldita!", sino que nos preguntamos qué es la muerte para ella. Sin duda la conciencia moral, la compasión, la ética, el sentido de culpa es un logro cultural a adquirir.
Los niños "desean" la muerte de todo aquel que se oponga a la satisfacción del deseo.
Desde su egoísmo (el niño freudiano no es malo, sí egoísta), no dejará "títere con cabeza". Padres, madres, hermanos, amigos, analistas, terapeutas, juguetes, "caerán" si se cruzan en su camino.
En sus juegos podríamos decir que se prepara para la paz haciendo la guerra, se prepara para la vida preparándose para la muerte. 3
La construcción del yo, la conservación de la vida, el interés narcisista, el egoísmo, exige la eliminación del obstáculo sacrificándolo, "lo mata",; la muerte es el castigo al que hiera al narcisismo oponiéndose a sus propósitos.
En nuestras mociones inconscientes ,dice Freud, eliminamos dia a dia, hora tras hora, a todos cuantos nos estorban el camino. ¡que el diablo se lo lleve!, quiere decir, ¡que la muerte se lo lleve!, un poderoso deseo de muerte habita el inconsciente ,incluso mata incluso por "pequeñeces", como la vieja legislacion ateniense de Dracon, no conoce otro castigo para el crimen q ue la muerte.
Nuestro inconsciente no ejecuta el asesinato,lo piensa y lo desea, asi todo perjuicio que el omnipotente yo reciba como tal,es crimen de lesa majestad,
Al jugar los niños "realizan el deseo inconsciente "o intentan cumplir el deseo
Figuradamente, sustitutivamente,al jugar
Al jugar un niño produce la posibilidad misma de que el deseo tenga lugar, pienso que el juego es "formacion del inconsciente y de lo inconsciente", es la formacion por excelencia de la infancia.
Represion y retorno de lo reprimido,se inscriben en el mismo acto ludico,que en su repeticion, según planteo, inscribe y sostiene lo inconsciente como tal,cada vez otra vez de nuevo.
Se dice "es solo un juego", la funcion paterna se pone en funcionamiento en el mismo acto de jugar, la prohibicion y prescipcion acontece, se puede "figuradamente" en su interior lo que no se puede fuera de el. El limite entre "afuera y adentro" del juego ,es para mi ,la represion, la ley, la castracion.
El niño realiza el deseo de muerte en sus juegos, mata a los objetos, los objetos "se mueren" el niño mismo ,como objeto,se muere y la reacción que acompaña a la muerte en el juego no es el dolor, el dolor no entra como afecto al juego. Se puede jugar a llorar, se puede jugar a festejar y se puede jugar a la indiferencia. El dolor interrumpiría el juego.
En el juego clínico surgen objetos para ser sepultados, enterrados con o sin velatorio y rito fúnebre. Natural o accidentalmente, son investidos para desinvestir hechos, para deshacer.
En el juego clínico se construirán, investirán objetos amorosos y de odio exclusivos a ese tratamiento, que son propios del mismo. La historia del tratamiento es la mayoría de las veces las vicisitudes por las que dichos objetos atraviesan hasta "su muerte".
El jugar tiene como motor el deseo dominante de "ser grande" y obrar como los mayores. Al jugar se realiza sustitutivamente el deseo inconsciente; el niño en sus juegos ocupa el lugar del Otro, lo hereda, se hace su heredero "sin riesgo". Heredar al otro implica su muerte, entonces al jugar el niño mata al otro, podríamos decir sin que exista crimen ni castigo, sin culpa.
Desde este planteo que propongo, el deseo de muerte es necesario al deseo de ser grande y condición del juego.
En el juego se sustituye al Otro, se personifica al muerto, se lo representa, se lo conserva identificándose con él. "Ser lo que el padre era", "Dale que yo era un papá" (allí donde Ello era el Yo debe advenir"). 4 El Yo donde Ello era. "Tener lo que tenía el papá", "Dale que yo era el papá y tenía una esposa".dale que" yo era un hombre...."
El parricidio e incesto lúdico se realiza "sin riesgo", y en el mismo acto lúdico el parricidio y el incesto se inscriben en su prohibición ya que "es sólo un juego", y allí se puede lo que fuera de él no.
El juego escribe la ley y funda deseo; implica satisfacción sustitutiva, "ganancia de placer", transformación de la pulsión en libido, transformación del goce en deseo.
Pienso el jugar como formación del inconsciente. Represión y Retorno de lo reprimido se inscriben allí en la infancia.
La muerte no tiene en los niños pequeños la misma significación que para los adultos. Dice Freud, Nada saben de los horrores de la putrefacción de la carne, del muerto que se hiela en la tumba fría, del espanto de la noche infinita que tanto desasosiegan al adulto. Estar muerto es para el niño pequeño "estar lejos"; solo con posterioridad quedará referido a "no volver más".
La ausencia es transitoria, desear la muerte del que molesta es desear su ausencia, su alejamiento por un tiempo: sería una muerte transitoria. Mas tarde la ausencia será definitiva y la vida quedará como transitoria.
El niño depende aún de la presencia del otro, de su amor, desea ser grande y no depender de su presencia pero aún no puede prescindir de él.
El juego le brinda el dominio de la situación permitiéndole "alejar" y "hacer retornar" al objeto a su antojo.
¿Qué relación guarda el "trabajo del duelo" y el "trabajo del juego?".
Llamo "trabajo de juego"( no lo he leido asi antes,) a los caminos psiquicos,las operaciones psiquicas por las que el juego llega a su "formacion"y tener el mismo estatuto de "formacion "del inconsciente.
Desde el punto de vista de las identificaciones coinciden, ambas suponen tanto a la identificación primaria como a las identificaciones secundarias, parciales, al rasgo "regresivas".
Ambas son "operaciones de compromiso"; se realizan bajo el conflicto de la obediencia y la revuelta.," atraccion y repulsion", "esfuerzo de desalojo y esfuerzo de dar caza" ambas operaciones implican, "sustraccion de investidura"(precc),"conservacion de la investidura"(incc)o "sustitucion de la investidura preconciente por una inconsciente". Ambas implican repetición y proceso represivo.
En ambas el trabajo es lento, pieza a pieza, cual rompecabezas a desarmar y volver a armar. En ambas lo doloroso, lo impresionante, se transforma al servicio del principio del placer en ganancia de placer. Ambas están al servicio del dominio yoico.
Arrojar el objeto, "que se vaya lejos, perderlo" en el juego escribe pérdida y elaboración de la pérdida, entonces el juego implica un trabajo de Duelo necesariamente pero "SIN DOLOR"
El Complejo de Castración se encuentra en el centro de la cuestión del Duelo y del jugar en la infancia, la pérdida se inscribe desde la significación fálica.
El niño adquiere la representación de un daño narcisista dice Freud, por pérdida corporal ya a raíz de la pérdida del pecho materno luego de mamar, de la cotidiana deposición de las heces y aún de la separación del vientre de la madre al nacer.
Empero, sólo cabe hablar de un Complejo de
Castración cuando esa representación de una pérdida se ha enlazado con los genitales masculinos. 5 "Al jugar, la inscripción de la castración tiene lugar." Según el planteo que propongo desde este trabajo
Es notorio para mi un hecho clínico: los niños con problemas orgánicos, con dificultades en el desarrollo, que tienen dificultades en la significación de la pérdida en términos del Complejo de Castración, presentan simultáneamente dificultades en el jugar. Faltas o ausencia del jugar en sentido estricto.
Algo en relación a la pérdida en el cuerpo del niño y a la pérdida del niño mismo, es decir a la pérdida del Otro y la inscripción de dicha pérdida enlazada con la diferencia sexual, se ha visto imposibilitada o dificultada. El trabajo del Duelo no se ha realizado o se realiza con dificultad dando lugar, planteo como hipótesis, al "Duelo Patológico" o a la "Melancolía".
Las consecuencias en la infancia son las graves perturbaciones en la construcción del psiquismo, pudiendo hacer su entrada el Autismo o la Psicosis según los casos.
Allí donde no hay Duelo hay Melancolía, donde no hay Duelo yo diría en este trabajo, no hay juego, y donde no hay juego no hay niño.
Propongo pensar también como hipótesis, si acaso cuando la lesión orgánica, el trastorno genético, la disfunción, etc., del cuerpo del niño queda identificado no parcialmente, es decir como rasgo parcial del cuerpo del niño sino identificado en forma masiva, narcisístamente, desde una identificación narcisista como "perjuicio", "afrenta", "injusticia", etc., en el otro parental donde el cuerpo mismo del niño es tomado masivamente, narcisístamente como herida, "hemorragia abierta", "mutilación", "daño", humillación", "perjuicio". Es todo herida, no tiene una herida.
La forma de lazo libidinal, de investidura amorosa al objeto es melancólica, es una "hemorragia abierta". En estos casos.
El cuerpo del niño se identifica narcisístamente, melancólicamente con "La insignificancia"6 por fuera de la significación fálica; no hay pérdidas a duelar fálicamente, no hay deseos de muerte a jugar, no hay deseo de ser grande, ya que todo el cuerpo del niño es el objeto perdido, la identificación con el objeto perdido es masiva y la sombra del objeto cae sobre un Yo que sin duda no llega a ser.
Hay vacío yoico porque no se constituye. La Melancolía infantil es la no constitución del Yo mismo, su muerte antes de nacer. Su cuerpo para el Otro es objeto de un "desagrado moral" por encima incluso de su fealdad, debilidad o inferioridad.
El autorreproche parental (consciente o inconsciente) se transfiere al reprocharle al niño inconscientemente, ubicándolo como culpable; se ha cometido un crimen y si merece castigo no puede ser otro para el narcisismo herido que la muerte.
¿Cómo desear matar al Padre si no hay Padre a quien matar? ¿Cómo matar a quien ya está muerto por no haber nacido? ¿Cómo jugar la muerte si es un asesino?
El odio inconsciente se ensaña, la Melancolía es una hemorragia abierta que sangra, duele y no cierra. No se sabe que se perdió porque la pérdida no se inscribió y entonces el dolor no es ante la ausencia del amado sino ante su presencia, dolor por no poder perderlo.
Donde no hay Duelo la Melancolía hace su entrada. No hay negación de la pérdida porque no hay afirmación donde no hay presencia de la ausencia,. El dolor no puede ser jugado,solo "es".
Por distintas vías el Autismo o la Psicosis hacen su entrada si la ligazón narcisista al cuerpo del niño no resiste el Duelo, si la Melancolía se instala.
Lacan 7 dice: "El objeto por el que estamos de Duelo era sin saberlo nosotros, el que se había vuelto y del que nosotros mismos habíamos hecho soporte de nuestra castración". "Estamos de Duelo por alguien de quien podemos decir yo era su falta."8.
Lo traumático, impresionante, doloroso no es la ausencia, la pérdida, sino es la no posibilidad de poder perder.
Desear la muerte del otro (su ausencia) y ponerla en juego en los juegos es una conquista del niño que luego dará lugar a la consciencia moral, los preceptos éticos, el sentimiento de culpa, con la latencia.
La ausencia del deseo de muerte hacia los objetos de amor en el niño es ausencia de deseo de ser grande, es ausencia de juego y sería un indicador clínico diagnóstico para nosotros de Melancolía infantil.
El juego sería la preparación para la muerte necesaria a la conservación de la vida, la guerra a librar para la paz.
En el año 1994 recibo en consulta a una niña de 4 años. El motivo: "La muerte de su hermana melliza", acaecida hace un mes atrás. Nuria no presentaba ningún trastorno, sólo era la preocupación parental por los posibles efectos futuros los que los llevaron a consultar.
Nadia, la hermana melliza muerta de Nuria tenía un diagnóstico neurológico de Disritmia en la zona del lenguaje con retraso madurativo. Pesaba 35 kilos y una obesidad creciente le impedía ya el manejo del cuerpo, por lo que les habían recomendado en el jardín especial al que concurría, consultar a un psicomotricista. Piden turno, en el camino muere, no llega a su primera consulta.
Nuria en el lugar de Nadia llegará a su primera consulta pero con un psicoanalista recomendado por dicho psicomotricista, o sea conmigo.
La muerte de Nadia se debió a las complicaciones de una varicela soster no atendida a tiempo, contagiada por una de Nuria, la "sobreviviente normal", quien 15 días antes tuvo varicela.
Recibo a los padres, recibo a Nuria. Durante cerca de un año realizo una intervención psicoanalítica que solo con posterioridad se decide como tratamiento a Nuria.
En el primer tiempo se trató del Duelo, búsqueda del culpable, tiempo de gran dolor para los padres, quienes veían a la muerta en la viva y a la viva en la muerta; quienes reconocían el pensamiento de alegría inconsciente por haberse quedado por lo menos con la normal. Quienes reconocía con culpa deseos previos de muerte hacia Nadia.
El autorreproche por la muerte (y el nacimiento) de Nadia se transfiere a Nuria: "...si no hubiera tenido varicela..." se transfiere a Dios: "...Nos la prestó y se la llevó..."
Nuria no llora; le dice a su madre cuestiones como: "¡...Tu mamá y tu hija están en el cielo...!", y a su hermana le habla: "¡Nadia bajá!
Extraña a su hermana, habla de ella con sus amigas, les cuenta de su muerte con detalles, ve fotos, videos. No deja que toquen sus
Cosas para que, cuando baje del cielo, no se enoje. Habla con Jesús y le pide que la cuide...
Le dice a la mamá que Nadia le dijo que allá está bien, que no quiere que llore más y que deje de pensar en ella.
Tiene temores nocturnos, episodios enuréticos, no duerme bien, se pasa a la cama de los padres, no quiere estar sola. Dice: "Yo me enfermé y se murió ..."; "Los doctores la mataron ..." Pide tener otro hermanito para jugar, le compran un gato.
La mamá de Nuria tiene cáncer; la mamá de la mamá murió de cáncer cuando ella estaba embarazada de las mellizas y también cuando estaba embarazada se entera de su propia enfermedad. El embarazo mismo fue tomado como un tumor o fibroma al comienzo.
"...Dios me las prestó por un tiempo ...", "... por suerte me dejó a la normal..."
De la relación entre ellas cuentan que era muy buena aunque había competencia normal: la enfermedad de Nadia " la beneficiaba a Nuria".
A los 2 años la pasó en el desarrollo, pero en el carácter y personalidad: Nadia era "como una muerta", Nuria "vivaracha". Ahora ya no tiene competencia. Nuria pasa a ser "el retrato de Nadia, la muerta.".
Nuria les canta: "¡Las mamás y los papás tienen hijos y se les mueren!".
La mamá cuenta sueños premonitorios... según ella de la muerte de su hija
El gato de Nuria se: enferma "¡¡¡Son todos unos mentirosos, me hacen sufrir!!!" dice: "Estoy sufriendo. Me duele acá y allá".señalandose el cuerpo
Los juegos de muerte aparecen: "cierra los ojos" y hace que deja de respirar..., se queda dura como una estatua... El juego se llama "Imitando a Nadia" según ella misma lo nombra.
Dibujos: "Esta es Nadia en el cielo, esta es mamá cuando dejó de llorar, este es Jesús hablando con mi mamá para que deje de llorar..." Quiere ir al cielo, quiere saber que hace Nadia allá.
Inventa canciones: "¡Los chicos nacen, se enferman y se mueren, y las mamás se la pasan llorando todo el día!"
Viajan a Córdoba de vacaciones; les dice a los padres: "¡Me tienen cansada: dejen de mirarme!
Los padres dicen que está tomando "cosas de Nadia", "se le parece en los gestos cada vez más..." Nuria les dice: "¡No quiero olvidarme de ella!"
Algunos juegos en el consultorio... Con un "títere payaso" le agarra la cara y la aplasta. Yo grito, pongo mi voz:": ¡¡AY!!", "me voy, no puedo respirar, no puedo oir, no veo..." Dice Nuria: "¡Ahora te vas a ir al cielo! Lo lleva al techo, "arriba", y hablando por el títere esta vez ella le da su voz y dice "¿Quién lo cuida a él si Jesús la está cuidando a Nadia?
Otro juego:" El que cierra los ojos primero se va al rincón," a las 3 veces: "Prendas". Las prendas preferidas: ir al cielo, hablar con Jesús y" mirar a su hermana"
Mientras tanto, los temores van cediendo hasta que un acontecimiento inesperado irrumpe... una internación de la madre debido a un episodio cardíaco respiratorio.
Nuria contrae "Púrpura, enfermedad psicosomática que se expresa con manchas en la piel.
Dice Nuria: "Cuando a mi mamá le duele algo, a mi también". Dice la mamá: "... parecía varicela..."
Una serie de enfermedades "psicosomáticas" aparecen: contracturas, otitis, fiebres, dolores inespecíficos, taquicardias...
Decido e indico tomarla en tratamiento a partir del cual las enfermedades desaparecieron hasta la actualidad. Durante el tratamiento pudieron jugarse los puntos de dificultad en el trabajo de Duelo de Nuria respecto a su hermana como jugar , tambien,su lugar de objeto en relación a la mamá..
La serie de juegos clínicos que el tratamiento desarrolló puso de relieve que se trataba de poder "perder de vista" y "perderse de vista".
"El títere payaso tuvo una historia que contar a través de Nuria y su análisis... cuando pudo por fin luego de mucho trabajo ser olvidado"
A modo de conclusión: el Duelo en la infancia implica definir la pérdida del objeto en su valor constitutivo y nos lleva necesariamente al juego donde la inscripción de la pérdida tiene lugar en términos de la significación fálica, es decir del Complejo de Castración y la Función Paterna.
Desde este planteo, he ubicado al juego en la infancia como "Formacion del inconsciente", la represion y el retorno de lo reprimido tiene lugar, asi, con las consecuencias que esto implica en la estructuracion de una posicion respecto al OTRO.
La relación entre el trabajo del Duelo y el del "TRABAJO DE JUEGO" plantea a ambos como formación de lo inconsciente. Si la Melancolía es Duelo no acontecido y el juego es la realización sustitutiva del deseo de muerte y Duelo por el ausente, los niños que no juegan entrarían en la variable melancólica, de particular recurrencia en los que presentan problemas en el desarrollo.
La diferente posición frente a la muerte entre el niño y el adulto da como resultado que el trabajo de Duelo sea realizado por diferentes vías. Planteamos el juego como la vía por excelencia donde el Duelo acontece.
Los niños realizan los Duelos "jugando" o no los realizan. Recordando a Freud y el mito de Tótem y Tabú, (1913) en el origen de la entrada a la cultura, está el Duelo y la muerte del padre es necesaria para que la ley exista, es decir que haya Padre. El niño repite en sus juegos cada vez la entrada misma a la cultura dándose un lugar en ella.
Notas
1 Trabajo presentado el 29 de septiembre de 2001 en las Jornadas "Los nombres de la tristeza en la clínica psicoanalitica", organizadas por, Asociación Psicoanalítica de Porto Alegre (APPOA.). Porto Alegre, Brasil.
2 FREUD, Sigmund. Interpretación de los sueños. Punto D: Sueños Típicos. Sobre el sueño de la muerte de los seres queridos. Traducido por J.Etcheverry. Tomo IV. Buenos Aires: Edic. Amorrortu, 1984.
3 FREUD, Sigmund. De guerra y de muerte. Traducido por J.Etcheverry. Punto III. Tomo XIV. Buenos Aires: Edic. Amorrortu, 1984.
4 FREUD, Sigmund. El Yo y el Ello. Traducido por J.Etcheverry. Tomo XIX. Buenos Aires: Edic. Amorrortu, 1984.
5 FREUD, Sigmund. Organización genital infantil. Traducido por J.Etcheverry. Tomo V. Buenos Aires: Edic. Amorrortu, 1984.
6 FREUD, Sigmund. Duelo y melancolía. Traducido por J.Etcheverry. Tomo XIV. Buenos Aires: Edic. Amorrortu, 1984.
7 LACAN, Jaques. Seminario La angustia. Inédito. Clase del 16 de enero de 1963.
8 LACAN, Jaques. Seminario La angustia. Inédito. Clase del 30 de enero de 1963.
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FREUD, Sigmund.. La interpretación de los sueños. Traducido por J.Etcheverry. Tomo IV. Buenos Aires: Edic.Amorrortu, 1984
________________ . De guerra y de muerte. Traducido por J.Etcheverry. Punto II. Tomo XIV.Buenos Aires: Edic.Amorrortu, 1984.
_______________ . La transitoriedad. Traducido por J.Etcheverry. Buenos Aires: Edic.Amorrortu, 1984
________________ . Duelo y melancolía. Traducido por J.Etcheverry. Buenos Aires: Edic.Amorrortu, 1984.
________________ . Esquema del Psicoanális. Traducido por J.Etcheverry. Tomo XXIII. p.193. Buenos Aires: Edic.Amorrortu, 1984.
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________________ . Organización genital infantil. Traducido por J.Etcheverry. Tomo V. Buenos Aires: Edic.Amorrortu, 1984.
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